Asechando alguna presa en el bosque (Chloe) [privado+18]

Me separe de sus labios sonriendo con malicia al escucharla aun percibiendo el contacto delirante de sus manos, y al notar aquella expresión en su rostro un tanto maliciosa pero a la vez encantadora me dediqué a corresponder con la misma intensidad ese beso, mientras sus manos acariciaban mi rostro, las mías apresaban con fuerza su pequeña cintura, aun degustando sus labios con vehemencia empecé a alejarme lentamente del tronco girando con agilidad nuestros cuerpos hasta lograr recostarla a ella contra el tronco para luego desprenderme de sus carnosos y perfectos labios-intimidantes palabras dulzura-murmuré guiñando el ojo y mostrando una sonrisa algo macabra-no cabe duda que eres la mejor, por eso me encantas, pero ten cuidado belleza… te sugiero que no me rebajes al nivel de tus presas primor-acaricié seductoramente su rostro con una de mis manos hasta rozar suavemente su cuello mientras mi otra mano continuaba apresando su cintura-puedes caer victima en tu propio juego y aun mas enredada que la pequeña mosca en esa telaraña primor, niégalo-esbocé una leve sonrisa de satisfacción frente a su rostro al ras de sus labios, deleitándome al sentirla de nuevo acorralada entre mis brazos

Al sentirla acorralada entre mis brazos casi creí tener el control, sin embargo supongo que la subestime demasiado dejándome cautivar en ese instante por su bello rostro que era sin duda una de sus armas más letales, lo cual le permitió escabullirse de mis brazos con facilidad, tenía razón, me confié demasiado y ella no era para nada fácil de intimidar, aunque era eso lo que la hacía aun más deseable, realmente había logrado embelesarme, tanto que no supe en qué momento terminé con ella sentada sobre mis piernas y sintiendo aquel tacto delirante de sus manos, acompañado por ese sabor único y exquisito de sus carnosos labios, pues ahora más que deseables se volvían un ansia pecaminosa… Al separarme de sus labios la observé detalladamente sabiendo que era mi momento de reaccionar o terminaría convirtiéndome en su marioneta-…graves problemas…vaya, si que eres presuntuosa…pero no puedes engañarme por muy tenaz que parezcas dulzura-murmuré frente a su rostro recuperando algo de control y compostura, ahora sacando provecho, ya que sus manos acariciaban mi rostro dando espacio a las mías para divertirse... Miré sus ojos fijamente esbozando una sonrisa maliciosa mientras deslizaba mis manos lentamente sobre sus piernas perfectas, colándome osadamente bajo su falda y disfrutando de ese leve estremecimiento en su cuerpo ante el contacto de mis dedos, nuevamente apresé su cintura mientras besaba su cuello suave y lentamente-no puedes negar que te tientas tanto como yo-susurré seductoramente en su oído, recorriendo con mi boca sus mejillas hasta terminar nuevamente en sus labios y disfrutando por un instante de su dulce aliento para luego besarla provocativamente

Me fundía en la dulzura de sus labios saboreándolos intensamente, mientras acariciaba su cintura deseoso, sin embargo lo hice con sutileza, extrañamente, como antes con ninguna… Al separarme lentamente de su rostro observando fijamente la docilidad de su mirada, sonreí levemente ante aquella confesión mientras junto su frente con la mía-Sabia que lo lograría, además quise contemplar la dulzura que esconde esa peligrosa mirada-reí maliciosamente, levantándola un poco de la cintura para acomodarla bien sobre mis piernas mientras aquellas delicadas caricias que solo ella brindaba, lograban tomar por poco nuevamente control sobre mi provocándome a querer probarla completamente sin restricción alguna… percibí de nuevo el roce de sus labios acompañado de su provocativo aliento dedicándome a observarla por un breve instante -shh… calla primor-susurré despacio sobre su rostro tomándolo delicadamente con ambas manos-Sabes muy bien que no es de un Florence perder… digamos que ambos jugamos una buena partida- acaricié su mejilla enarcando la ceja-La soga al cuello o una tregua entre los dos... que dices dulzura-sonreí con malicia robando un pequeño beso de sus labios y nuevamente volviendo mi mirada a ella

La observaba detenidamente disfrutando de aquella sonrisa tímida pero a la vez sensual y tentadora-que pasa si aceptas la tregua, humm… quizá solo tú sabras hasta donde te arriesgarías a llegar primor -exclamé esbozando una sonrisa un tanto maliciosa mientras delineaba suavemente con mis dedos la comisura de sus labios-y en cuanto a condiciones… cariño, crees que soy de poner condiciones-negué moviendo la cabeza mientras guiñé el ojo con picardía-simplemente sería un tipo de alianza conveniente para ambos-aseguré arqueando una ceja-aunque te advierto que difícilmente escaparás de mi-sonreí levemente rozando sus labios con los míos para luego besarla intensa y provocativamente-que me dices ahora dulzura-cuestioné después de separarme de sus tentadores labios mientras la miraba con detalle acariciando sutilmente su rostro pálido pero sensual y endemoniadamente hermoso.

La escuche con detenimiento esbozando una leve sonrisa de complacencia-Me complace escuchar ese asentimiento de tus labios dulzura-exclamé posando mi mano bajo su mentón para fijar mi mirada en su rostro-sin embargo sería mucho más interesante saber el porqué de tu interés en poseer el control-murmuré apresando nuevamente su cintura con firmeza mientras con mis labios rocé suavemente su mejilla-es que acaso le temes a la idea de que logre hacerte perder ese control-susurré seductoramente sobre su oído besando su cuello suavemente hasta ascender de nuevo a sus mejillas buscando sus exquisitos labios depositando un beso corto-Sabes que me has encantado desde siempre y eres una de las mayores razones por las que volví-afirmé acercándome de nuevo a sus labios para besarlos con intensidad mientras mis manos acariciaban descaradamente su cintura... quizá un poco mas abajo

Besaba exquisitamente ese manjar que eran sus labios mientras mis manos recorrían lujuriosamente aquella tersa piel de sus muslos perfectos-Relájate primor que el premio de consolación es especial-aseguré en modo seductor sobre su oído para luego besar su cuello lentamente hasta sus delicados hombros, colándome entre su blusa, en tanto noté que sus manos se deshicieron de mi camisa me separé de ella un breve instante observándola intensamente dibujando en mi rostro una sonrisa torcida, realmente era una bella y perfecta tentación esa mirada y ese rostro encantador; no me detuve más y sin pensarlo llevé una de mis manos hasta su cintura apresándola con firmeza mientras con la otra tomaba mi camisa para luego levantarme del tronco y ponerme de pie con ella observándola fijamente-Entonces ven aquí cariño-aseguré su delicado cuerpo contra el mío sosteniendo su cintura mientras partimos saltando ágilmente sobre las ramas de los arboles hasta terminar colándonos entre los grandes ventanales de un molino cercano, al llegar por fin adentro, la acorralé sutilmente contra uno de los muros del concreto-ahora si estaremos solos tu y yo muñeca… por fin libres de intrusos-exclamé frente a su rostro sonriendo con un tanto de malicia apoderándome nuevamente de sus exquisitos labios saboreándolos apasionadamente mientras ceñía su cintura acariciando sus caderas y glúteos con intenso deseo

Mis caricias y besos en ella cada vez eran más desenfrenados, realmente la deseaba con locura, me separe de sus labios mientras mis manos se aferraban aun mas a su pequeña cintura introduciéndolas bajo su blusa permitiéndome retroceder con ella hasta sentirme preso contra aquella máquina sintiendo la suavidad de sus manos sobre mi pecho, aquello aumentaba mis ansias y antes de que pudiera arrebatar mis pantalones tomé sus manos posándolas sobre mis hombros mientras continuaba devorando sus labios intensamente, me separé por un instante de ellos para observarla con una leve sonrisa-tu como la tentación de una fruta prohibida...nada mas dulce y encantador-relamí mis labios-me encantas-exclamé apoderándome nuevamente de sus labios en tanto baje mis manos a su cintura deslizándolas por sus caderas hasta sus muslos aferrándolas en ellos mientras levantaba su cuerpo logrando que encajara sobre mi cintura para luego girar y sentarla sobre la mesa junto a la máquina dándome paso a deshacerme de su blusa para luego acariciar su tersa espalda desnuda mientras mis labios marcaban camino sobre su cuello, hasta sus hombros deslizando lentamente la tira de su sujetador.


off: cumplido primor!!

Había logrado despojarla de su blusa y sujetador permitiéndome ahora acariciar sin impedimentos la suave seda de su espalda separándome de sus labios por un instante para contemplarla, su insinuante mirada y aquellas acciones que tentaban, sin dudarlo ni un segundo mis labios tomaron nuevamente posesión de los suyos devorándolos con total desenfreno mientras mis manos ceñían su cintura, recorriendo su pequeño abdomen hasta culminar sobre sus ansiados pechos perfectos acariciándolos y masajeándolos lujuriosamente en tanto sentía sus manos traviesas intentando quitar mis pantalones, me separe un poco de ella permitiendo que se bajara de la mesa mientras retrocedía tropecé con un monton de bolsas de granos provocándome desequilibrio y con un leve empujón de su parte logro hacerme caer al tiempo que me despojaba sagazmente de mis pantalones y provocándome por más con cada una de sus acciones, su roce, sus besos y tacto me incitaban sin control-de acuerdo quieres que juguemos-sonreí con malicia levantándome levemente logrando atrapar su cintura y con un impulso ponerme sobre ella-ahora es mi turno muñeca-susurre frente a su rostro al tiempo que retiré su falda con ímpetu dejando tan solo un pequeño panty acercándome nuevamente hasta su boca mordiendo provocativamente su labio inferior para luego marcar con la humedad de mis labios su mentón, bajando hasta su cuello y terminando el recorrido en la elevación de sus pechos mientras mis manos los masajeaban casi con devoción descendiendo de nuevo a ceñir su cintura, intentando palpar cada pedazo de su piel haciendo que lograra estremecerse de deseo

Percibí su cuerpo estremeciéndose con cada caricia que proporcionaba sobre ella, esa sensación me enloquecía, un leve gemido escapó de sus labios incitándome aun más mi desenfreno… Nuevamente fije mi mirada extasiado en sus ojos intensos sonriéndole seductora y maliciosamente-tú lo sabes provocar...muñequita-musité deleitándome nuevamente con sus labios degustándolos con intensa pasión, un fugaz escalofrió recorrió mi ser entero ante el suave y lento roce de la tersa piel de su pierna sobre la mía, acompañado por sus finas manos acariciando mi espalda, mi cuerpo por dentro ardía de pasión y lujuria, sorprendentemente ella lograba provocarme sensaciones tan humanas que difícilmente podía controlarlas, al escuchar su cuestión fije mis ojos en ella-crees que lo haría ahora-un poco agitado susurré rozando sus labios con los míos, embriagándome con su dulce y adictivo aliento, mientras mis manos vagaron nuevamente sobre la suave piel de su espalda elevando su cuerpo levemente para atraerlo contra el mío-yo siempre juego hasta el final-afirmé tomando devuelta sus labios, una adicción irresistible, los besaba, devorándolos sin mesura, en tanto me abria paso para posarme entre sus piernas provocando un leve y placentero roce de nuestras intimidades aun cubiertas por prendas.

Mi ser entero se deleitaba palpando la finura de su piel, acariciando cada parte de su cuerpo sintiéndole estremecer con cada roce, a pesar de la frialdad que emanaban nuestros cuerpos, en contacto y entre placenteras caricias parecían elevar la temperatura del ambiente, ansiaba cada parte de ella, su cuerpo que vibraba de pasión en tanto devoraba la exquisitez de sus adictivos labios mientras balanceaba lentamente mi cuerpo entre sus piernas, rozando placenteramente nuestras intimidades aun cubiertas, aumentando la excitación de nuestros cuerpos; resoplé jadeante al percibir el tacto de sus manos sobre mi pecho provocando que mis labios abandonaran los suyos para dedicarme a observar el éxtasis que reflejaban su rostro y la deliciosa humedad de sus labios intensificando mis ansias por ella, me perdía en locura de su perfecto cuerpo, permitiendo que esta vez ella tomara el control del juego, lo supe al notarla sobre mí, al tiempo que la tersura de sus manos acariciaban impetuosas mi pecho, extasiando mi ser completo; ahora mis manos acariciaban con deseo la tersura de sus muslos deslizándose sin mesura hasta sus caderas y glúteos, mi cuerpo se irguió al percibir el descenso de sus manos que sin más arrebataron lo único que me cubría dejándome expuesto por completo, provocando un ahogado gemido de mi parte ante el placer de sus manos excitando mi miembro, aquella acción desvaneció el poco de cordura que me guardaba; en cuanto sentí de nuevo sus labios los saboree con desenfreno mientras mis manos ciñeron su pequeña cintura con fuerza para luego separarme a pocos centímetros de sus labios e impulsar mi cuerpo quedando sentado con ella sobre mis piernas en tanto mis manos palparon sus hombros descendiendo sobre sus brazos para nuevamente deslizarlas sobre la seda de su espalda, al mismo tiempo que mis labios marcaron camino iniciando en sus tersos y delgados hombros deteniéndome algo agitado por un breve instante sobre la curvatura de su cuello-vaya que sabes como jugar dulzura-susurré cerca a su oído con seducción continuando con mi lengua marcando camino desde su cuello hasta su mentón donde me detuve nuevamente y saboree mis labios-pero aun no estoy fuera del juego-sonreí maliciosamente girando nuestros cuerpos nuevamente posándome sobre ella descendiendo con mis labios sobre la elevación de sus senos saboreándolos con vehemencia, mientras mis manos palpaban la tersa piel de su pequeña cintura, descendiendo hasta la parte más baja de su abdomen, colándome atrevidamente bajo su prenda, frotando con mis dedos suave y lentamente su intimidad, provocando intenso placer y excitación en ella… A pocos instantes me separe de su cuerpo para despojarla finalmente de la estorbosa prenda que aun la cubría, dejando expuesto por completo ese cuerpo perfecto, verdaderamente tentador, allí dispuesto y dominado por el éxtasis que a ambos nos envolvía delirantemente-sin duda ¡¡perfecta!!-musité despacio contemplándola con embeleso mientras empecé nuevamente deslizando mis manos sobre sus muslos lentamente hasta apresar su cintura arqueando levemente su espalda para luego delinear con mi lengua la comisura de sus provocativos labios sonriendo maliciosamente-ahora ambos nos atendremos a las consecuencias-aseguré adueñándome nuevamente de sus labios degustándolos con lujuria y pasión desenfrenada mientras rosaba mi miembro lentamente sobre su intimidad palpitante tentándole por un breve instante para luego adentrarme en ella al unisonó de un ahogado gemido de placer